En el transcurso de la campaña, que cuenta con la colaboración de Cinfa y del centro de medicina deportiva Survey, las farmacias SANIFARMA realizarán unas sencillas pruebas para ayudar a identificar el riesgo cardiovascular. En esta edición, la campaña estará centrada en la práctica deportiva como factor de prevención de las enfermedades cardiovasculares y en los requisitos necesarios para que dicha práctica se haga de forma segura.
Mediante una serie de mediciones se determinará el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular a través del estudio de: edad, sexo, altura, peso, perímetro de cintura, tabaquismo, antecedentes familiares, presión arterial, nivel de colesterol y el ejercicio que se realiza. Según el resultado obtenido, se recomendará a la persona que acuda a su médico para establecer el diagnóstico y, si realiza deporte, se valorará también la oportunidad de realizar una prueba de esfuerzo (en función de la intensidad del ejercicio que se practica y de la presencia de uno o varios factores de riesgo).
Además, las farmacias ofrecerán información con el apoyo de diferentes folletos sobre los distintos aspectos de la enfermedad así como consejos para reducir el riesgo cardiovascular, haciendo especial hincapié en la práctica deportiva segura.
Mueve tu corazón…. Pero hazlo con cabeza
La práctica regular de ejercicio físico es recomendable y está asociada a disminución de la mortalidad, especialmente en enfermedades y episodios de origen cardiovascu-lar, como el infarto o la muerte súbita.
Hay que tener en cuenta que es necesario adaptar el ejercicio a la edad y condición física de cada persona y someternos de forma periódica a los controles de salud que determinen si contamos con factores de riesgo cardiovascular (hipertensión, colesterol alto, diabetes…).
A la hora de iniciar la práctica deportiva hay que tener en cuenta los siguientes aspectos:
- Controles de salud. Vigila los principales indicadores de riesgo cardiovascular (hipertensión arterial, glucosa en sangre, colesterol, obesidad, tabaquismo…).
- Hidratación. Mantente hidratado antes, durante y después del ejercicio.
- Alimentación. Lleva una alimentación equilibrada, que incluya todos los grupos de alimentos. Si la actividad física es exigente se deberá aumentar el aporte calórico
- Entrenamiento progresivo y con el material adecuado. Evitarás lesiones y permitirás que tu cuerpo se adapte de forma gradual a la actividad física.
“Hay que diferenciar entre deporte de competición, profesional y práctica deportiva recreacional”–asegura la doctora Marisa Martínez Zazo, especialista en Medicina Deportiva del centro Survey-. “La práctica del deporte de gran exigencia y la consecución del alto rendimiento –añade- requiere una condición física adecuada; además existe riesgo de lesión y problemas de salud durante su entrenamiento y ejecución. Esta práctica requiere entrenamiento planificado, prevención, en algunos casos supervisión…”.
En cuanto al tipo de ejercicio recomendado para cada edad, la doctora Martínez insiste en que “la elección del deporte depende no tanto de la edad sino de la experiencia deportiva anterior, de si existe enfermedad previa y/o los factores de riesgo cardiovascular (hipertenso, diabético, colesterol…), de los objetivos que tenga, si es la competición o recreación, preferencias personales y la disponibilidad de medios, así como elegir una buena equipación para evitar riesgos de lesiones”.