Deshidratación, calambres musculares, agotamiento… Estas son algunas de las consecuencias directas del calor sobre nuestra salud. Pero existen otras más graves. Las altas temperaturas aumentan los niveles de ozono y otros contaminantes, agravando enfermedades cardiovasculares y respiratorias y provocando incluso la muerte en algunos casos.
Según se recoge en el informe “Estado del clima en Europa 2023”, la mortalidad vinculada al calor ha aumentado alrededor de un 30% en los últimos 20 años en Europa. Y España no es una excepción. El pasado verano fue el tercero con mayor mortalidad atribuible al calor excesivo, con 2.155 fallecimientos, después de la ola de calor de 2003 y el verano de 2022.
Entre las consecuencias del calor sobre la salud destacan la deshidratación, los calambres musculares, el agotamiento y, en los casos más graves, la insolación o el golpe de calor.
Golpe de calor, qué es y cuáles son sus síntomas
Cuando el cuerpo alcanza una temperatura superior a 40°C, durante periodos que se prolongan entre 10 y 15 minutos, los mecanismos reguladores de calor pueden bloquearse produciéndose un golpe de calor.
Los síntomas de un golpe de calor son:
- Sed intensa y sequedad en la boca.
- Temperatura mayor a 39º C (medida en la axila).
- Sudoración excesiva.
- Sensación de calor sofocante.
- Piel seca.
- Agotamiento, cansancio o debilidad.
- Mareos, vértigos o desmayo.
- Calambres musculares.
- Dolores de estómago, falta de apetito, náuseas o vómitos.
- Dolores de cabeza (sensación de latido u opresión).
- Estado de confusión, desorientación, delirio o incluso coma o convulsiones.
En estos casos es importante actuar con rapidez. En primer lugar, ir a un lugar más fresco, hidratarse rápidamente con agua o, preferiblemente, con una bebida con electrolitos, y quitarse la ropa sobrante que impida la evaporación del sudor.
El objetivo es enfriar la temperatura corporal cuanto antes con compresas de agua helada o una ducha de agua fría.
Consejos para cuidar tu salud frente al calor
Para cuidar tu salud frente a las altas temperaturas es importante tener en cuenta estos consejos:
- Limita las actividades al aire libre, sobre todo durante las horas centrales del día, en las que el calor es más intenso.
- Utiliza prendas de ropa de tejidos naturales, para favorecer la evaporación del sudor, la principal forma que tiene el cuerpo de enfriarse, y de colores claros. Usa un sombrero para proteger la cabeza.
- Bebe agua a lo largo del día y evita las bebidas alcohólicas, que aceleran la deshidratación. Se recomienda beber antes de tener sed, tomando unos 150 ml cada hora aproximadamente. Las frutas como el melón y la sandía y las verduras también te ayudarán a mantenerte hidratado/a.
- Vigila especialmente a lactantes, a niños menores de 5 años, embarazadas, personas mayores y enfermos crónicos, con diabetes, obesidad, problemas cardiovasculares, renales, respiratorios, etc, que son más vulnerables frente a las altas temperaturas.
- También es importante estar especialmente alerta en el caso de las personas que utilizan ciertos medicamentos: como diuréticos, antihipertensivos o antidepresivos. Y en trabajadores con empleos en el exterior (construcción, agricultura, etc.)