Se calcula que alrededor del 20 % de la población sufre este tipo de fotodermatitis. Mujeres jóvenes y de pieles blancas son el colectivo en el que se produce un mayor número de casos. La aparición de la EPL no suele ser inmediata, sino que pueden pasar horas e incluso días desde la exposición al sol hasta la aparición de los síntomas.
La mejor forma de descartar otras enfermedades de la piel es comprobar si la reacción se produce solamente en aquellas zonas previamente expuestas al sol o si también lo hace en otras zonas no expuestas.
Las zonas en las que se manifiesta esencialmente son: escote, hombros, brazos y piernas.
El mejor tratamiento de la “alergia al sol” es la prevención, evitando la exposición o protegiendo las zonas afectadas con prendas
Otra recomendación a tener muy en cuenta es la exposición solar progresiva (de 20 a 30 minutos diarios para empezar), evitando siempre las horas centrales del día (de 12 a 16 horas) , así como la aplicación de cremas con un factor de protección solar alto y con filtros tanto rente a los rayos UVB como UVA.
Medicamentos y sol
Asimismo, es importante tener en cuenta que algunos medicamentos pueden provocar fotosensibilidad por lo que es importante que consultes a tu farmacéutico/a si tienes alguna duda en este sentido.
La fotosensibilidad puede provocar dos tipos de reacciones: fototóxicas o fotoalérgicas. Las reacciones más frecuentes son las primeras, y no afectan al sistema inmunológico. Esta reacción se produce en personas expuestas a una dosis alta de medicamento fotosensibilizante unido a la radiación solar. Normalmente, la reacción fototóxica produce lesiones que tienen la apariencia de quemadura solar exagerada, con sensación de ardor y formación de microvesículas o bien de urticaria.
En lo que respecta a las reacciones fotoalérgicas, éstas se deben a medicamentos que se aplican sobre la piel. Nuestro cuerpo absorbe la energía solar y comienza una reacción fotoquímica. Esta reacción es menos común y se presenta en personas con una determinada predisposición. Puede provocarse incluso con dosis bajas del medicamento fotosensibilizante asociado a la luz solar.
La reacción fotoalérgica se manifiesta de forma similar a la dermatitis de contacto, con erupción eccematosa, edema y prurito intenso. Los síntomas se notan entre 12 y 72 horas después de la exposición al sol. La reacción se produce en la superficie expuesta al sol, aunque con el paso del tiempo puede extenderse a otras zonas protegidas de la piel.
Algunos medicamentos fotosensibilizantes son: anestésicos locales, anticonceptivos orales, antidepresivos, antihistamínicos, antisépticos, benzodiacepinas, corticoides, laxantes o diuréticos, entre otros. Pero además existen también otros productos fototóxicos como algunos colorantes, perfumes, esencias de limón o lavanda que pueden producir reacciones adversas.
