Molestias digestivas

Molestias digestivas

Las molestias digestivas son unas de las protagonistas de las consultas en la farmacia. Síntomas como las digestiones pesadas, la acidez o el estreñimiento crónico pueden ocultar una patología de fondo, por lo que es importante detectar su origen.

Entre las cuestiones a dilucidar, si el dolor mejora o empeora al ingerir alimentos, si se toma alguna medicación de forma regular (los antiinflamatorios por ejemplo pueden tener efectos secundarios sobre nuestra salud digestiva), las frecuencias y el aspecto de las deposiciones, etc.

Respasamos algunas de las enfermedades que pueden estar detrás de las molestias digestivas más frecuentes.

Gastritis

La gastritis es una inflamación de la mucosa del estómago que suele producir ardor, náuseas, vómitos, dolor de estómago, hipo o pérdida de apetito, entre otros síntomas.

Entre sus factores desencadenantes figuran desde enfermedades autoinmunes a consumo abusivo de tabaco y alcohol, medicación continuada con antiinflamatorios y, el más común, la infección previa por helicobacter pylori.

Úlcera péptica

La úlcera péptica, al igual que la gastritis, está mayoritariamente causada por una infección previa por helicobacter pylori. De hecho se calcula que entre el 10 y el 20% de los infectados por esta bacteria desarrollarán una úlcera péptica a lo largo de su vida.

Se trata de una llaga o lesión producida por un desequilibrio entre elementos agresivos y defensivos de la mucosa gastroduodenal.

Esta enfermedad está asociada también a los tratamientos largos con antiinflamatorios. En estos casos, se recomienda tomarlos después de las comidas, evitando tumbarse hasta media hora o una hora después. También es aconsejable consultar con el médico para que valore la posibilidad de administrar un protector de la mucosa gástrica.

Reflujo gastroesofágico

La enfermedad por reflujo gastroesofágico es bastante común, afecta a alrededor del 15% de la población.

Entre los síntomas de la enfermedad figuran ardor, dolor punzante localizado en el epigastrio (conocido coloquialmente como “la boca del estómago”), náuseas, vómitos, diarrea, hinchazón abdominal y flatulencia, entre otros.

Los síntomas mejoran al comer y empeoran dos o tres horas después de las comidas, así como durante la noche.

Síndrome del intestino irritable

El síndrome del intestino irritable es un trastorno crónico caracterizado por episodios recurrentes de dolor abdominal y alteraciones intestinales como diarrea, estreñimiento o alternancia de los dos primeros.

Entre los síntomas de este síndrome figuran: dolor abdominal que mejora tras defecar; trastornos y alteraciones en el ritmo intestinal; cambios en la forma y la frecuencia de las deposiciones, fatiga crónica, dolor de espalda, cefalea, insomnio, etc.

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Farmacias Sanifarma

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