Las uñas, un indicador de salud a tener muy en cuenta

Las uñas, un indicador de salud a tener muy en cuenta

Uñas con manchas blancas

El término médico que define la formación de manchas blancas en las uñas se denomina leuconiquia. Las manchas blancas se originan a consecuencia de pequeñas roturas en la base de la uña, llamada matriz, donde se crean las células de la uña. Las manchas se forman al golpearse la uña, muchas veces sin percatarse de ello. Pero también pueden deberse a otros orígenes con cierta importancia clínica, como síndromes hereditarios, o ser la señal visible de una enfermedad o trastorno de salud, como la psoriasis o la nefritis, entre otras. En estos casos siempre habrá que consultar a un especialista.

Respecto a la nutrición, la aparición de estas pequeñas manchas blancas puede revelar una ingesta deficiente de ciertos nutrientes. Pero, contrariamente a lo que dice la creencia popular, no es la falta de calcio lo que origina las manchas blancas, sino la deficiencia de zinc. Si el color se debe a enfermedades más serias es necesario acudir a un especialista, pero si es debido a falta de nutrientes, se recomienda la ingesta de estos alimentos: zanahoria, germen de trigo, frutos secos o berberechos. Y para asegurarnos de ingerir las vitaminas y minerales suficientes y necesarias,tomaremos algún suplemento vitamínico que nuestros especialistas en farmacia te aconsejarán.

Las manchas blancas también aparecen cuando se utiliza esmalte en las uñas durante un largo periodo de tiempo, pero son manchas que desaparecen con el pulido de la uña.

Uñas frágiles que se rompen constantemente

Esto quiere decir que la uña está seca: le falta hidratación. La solución es aplicar un aceite nutritivo en la uña y en todo su contorno todos los días.

Uñas estriadas

Las estrías son las arrugas de la uña. A menudo este síntoma aparece cuando la uña se convierte en quebradiza. Este tipo de uña aparece con la edad. Es necesario aplicarle proteínas y queratina, así como un endurecedor al menos una vez a la semana.

Uñas de color amarillo

Cuando se elimina el esmalte pueden aparecer estos pigmentos debido al filtrado bajo las capas de la queratina, pero desaparecen fácilmente con un pulido de uñas. Si este color permanece, se pueden utilizar blanqueadores específicos pero no es bueno utilizarlos mucho. También es común que las personas que fuman tengan los dedos y las uñas amarillentas. Pueden blanquearse con cosméticos (suelen ser pastillas efervescentes en los que introducir la mano). Si este color continuo es un signo claro de infección, hay que acudir al médico inmediatamente.

Uñas que no crecen

El crecimiento de la uña se debe a la correcta irrigación de sangre, que nutre la raíz o matriz de la uña. Si se tiene mala circulación es posible que las uñas crezcan muy lentamente. Se recomienda masajear la uña y su contorno con un producto nutritivo que nutra la raíz y active la circulación sanguínea.

Uñas que crecen demasiado

No en longitud, sino en grosor. Es difícil de solucionar, aunque se puede actuar para disimularlo con colores específicos que ayuden a “aplanar”. Con este efecto óptico se consiguen unas uñas bonitas. En este caso, los colores oscuros suelen ser los más apropiados, utilizando una mano experta en el trazado del esmalte.

Uñas curvas

Muchas veces se debe a haberlas mordido durante mucho tiempo. Lamentablemente, en este caso no hay mucho que hacer, excepto disimularlo usando colores pastel que por su efecto óptico aplanan la uña.

Uñas con exceso de cutícula

Nunca hay que cortar las cutículas, ya que lo único que se consigue con ello es que crezcan más y, además, se endurezcan. La piel si se corta actúa igual que ante una herida: crece de forma abundante y dura para formar una cicatriz que tape el daño. Si cortamos la cutícula crecerá más y más dura.

El mejor sistema para eliminar la cutícula es hidratar la uña y su contorno una vez al día con una crema o un aceite específico. Una vez por semana, aplicar un ablandador de agua o un gel en el borde de la uña para ayudar a eliminar la piel muerta con la yema de los dedos o la ayuda de un palito sólo sobre la uña. Nada de retirar las cutículas, ya que de esta forma las separamos de la uña y dejamos a ésta desprotegida. Además, podemos dañar la matriz de forma irreversible.

Uñas enterradas o encarnadas

Se presenta cuando el borde de la uña se entierra dentro de la piel del dedo, habitualmente del pie. Es posible que se presente dolor, enrojecimiento e inflamación alrededor de la uña. Una uña encarnada del pie puede ser el resultado de muchas cosas, pero los zapatos que no ajustan bien y las uñas mal cortadas son las causas más comunes. Algunas deformidades del pie o de los dedos del pie también pueden ejercer presión adicional en dichos dedos. Para evitarlo, hay que usar un calzado suficientemente ancho, que no apriete. Las uñas deben cortarse rectas, no redondeadas, y nunca hay que cortarlas muy a ras de la piel. Las personas que presentan esta tendencia deben acudir de forma asidua a un buen especialista.

Para cualquiera de estos problemas que se pueden presentar en tus uñas, desde Sanifarma nos apoyamos en el laboratorio Vitry, laboratorio que confía y cuida la salud de tus manos.

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Farmacias Sanifarma

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